Para comprender mejor, es importante conocer que la palabra “equinoccio” proviene del latín “aequus” (igual) y “nox” (noche) = NOCHE IGUAL. Así se define lo que sucede con la luz solar y que significa “noche igual”, ya que el día y la noche tienen exactamente la misma duración.
Es entonces que la Tierra recibe en mayor o menor medida los rayos de sol según la época del año y depende de la posición del planeta en su órbita. El sol alcanza su cenit (su punto más elevado). El otoño comienza con el equinoccio de otoño el 22 de septiembre y termina con el solsticio de invierno el 21 de diciembre en el hemisferio norte .
En realidad el otoño es una estación llena de contrastes de colores, mucho mas notorio en los paises del norte o del sur, es una apoca que activa sensaciones diferentes y una excusa perfecta para degustar algunos alimentos exquisitos y sobre todo para celebrar algunas fiestas que marcan la cultura de muchos países. Cuando llega el equinoccio de otoño, el día y la noche tienen la misma duración de manera que desde la antigüedad se considera que la llegada de esta estación marca por una vez el equilibrio en el mundo de modo que nosotros podemos interpretarlo como un buen momento para alcanzar el equilibrio en nuestras vidas y ordenar todos esos «asuntos pendientes».
EQUINOCCIO EN DIFERENTES CULTURAS
LA SERPIENTE EMPLUMADA Chichén Itzá.
El hecho de que el día y la noche tengan la misma duración tiene consecuencias bastante especiales. Una de ellas tiene lugar en la famosa pirámide maya de Kukulcán, en Chichén Itzá (México). Tanto en el equinoccio de otoño como en el de primavera, la luz y las sombras del lugar se proyectan de una forma en las escaleras del templo que crean un efecto óptico en el que parece que una enorme serpiente emplumada desciende por las escaleras. Además, el hecho de que en la base del templo haya dos inmensas cabezas de serpiente hace que el efecto sea todavía mayor. Un fenómeno que solo puede verse unas horas al año y que para muchos está cargado de simbolismo.
JAPON
Los equinoccios en japón marcan un periodo llamado Ohigan u O-Higan, en el que muchas personas honran a sus antepasados. Según la creencia budista del país nipón, la otra vida está al oeste, y es precisamente durante los equinoccios cuando el sol se pone directamente en el oeste. Por ello, durante los días cercanos a los equinoccios, muchos japoneses visitan las tumbas de sus familiares y seres queridos.
EN PAISES ANDINOS
Se toman unos minutos para agradecer todo lo que recibimos, los deseos cumplidos hasta el momento. Porque se preparan para la entrada al invierno que es un tiempo de balance interno acerca de dónde estamos paradas. Para las culturas andinas, el Equinoccio de Otoño se celebraba en la ceremonia Pacha Poqoy Raymi, que marcaba para nuestro hemisferio el tiempo de preservación de las semillas que servirán para la próxima cosecha.
OTONO EN COREA.
Celebran el décimo mes lunar " El Ritual para los dioses del hogar" . llamado “SANDGAL”. La celebración del ritual de otoño es considerada a menudo como un ritual del pueblo, sin embargo cada familia realiza su propio ritual. Alguno particular es que esta fecha puede aplazarse al ocurrir un acontecimiento impuro en el pueblo, incluido el caso de nacimiento o fallecimiento de alguien o la menstruación de la mujer del hogar. Esto hace que se postergó la celebración por un mes.
Ese día se tiene prohibido sacar el arroz de sus casas. El día del ritual, la mujer de la casa se levanta temprano, reza y prepara un pastel de arroz para colocarlo sobre la mesa para el ritual. En el proceso de la preparación del pastel de arroz no debe existir ninguna impureza. Por lo tanto, la mujer de la casa reza haciendo la reverencia y frotándose las manos para que se cocine bien el pastel de arroz durante la preparación del pastel. El día en que se celebra “SANDGAL”, la prioridad es poner los mejores granos de arroz o soja cultivados durante la primera cosecha del otoño en una jarra de barro y luego el montón de paja de forma cónica también se reemplaza por paja nueva.
CELEBRACIÓN CELTA MABON
En la cultura celta la llegada del otoño se celebra con la festividad conocida como Haleg-Montah, que significa Mes Sagrado. Entre las creencias neopaganas, esta festividad se popularizó con el nombre de Mabon, que proviene de un personaje de la mitología galesa.
Esta festividad también se conoce en la actualidad como “Tiempo de Cosecha”, “El banquete” o “Día de Acción de Gracias”. Es una fecha señalada en la que se da las gracias por los frutos que han surgido de la tierra y se recuerda la importancia de compartirlos para lograr bendiciones de los dioses para los meses invernales.
EN COMPAÑÍA DEL ARCÁNGEL MIGUEL RITUALES DE OTOÑO
MATERIALES
Esencia de Romero
Limón o aromática de limón
Naranjas.
Vela Naranja y vela blanca
Hoja de Papel.
Es un dia muy especial porque vamos a honrar la duración del día y la noche y el equilibrio entre ambos, son muchas las personas que eligen quedarse despiertos toda la noche para recibir al otoño.
EN LA MAÑANA
Lo ideal es empezar el día con un baño de inmersión poniendo en tu bañera o esponja de baño unas gotas de esencia de romero. El romero cuenta con excelentes propiedades tónicas y estimulantes, por lo que ayuda a mejorar problemas como las malas digestiones. Además, al favorecer una correcta digestión, nos ayuda con la memoria.
Una aromatica o té de limón en ayunas y consumir naranjas en la mañana. También es importante activar las endorfinas ingiriendo alimentos dulces y comidas algo picantes. Además, dedicaremos un momento del día para estar con nosotros mismos, con nuestros pensamientos y nuestras emociones.
AL MEDIO DIA
Al medio dia encenderemos una vela naranja que representa el astro rey, el Sol, que en esta época se retira un poco y simboliza la fuerza y la capacidad de superación ante situaciones difíciles y complicadas. Esta sera la intencion que le vamos a dar. Pero más que nada tiene que ver con nuestra mente, para que no bloquee, aportando energía, vitalidad y empuje. Nos visualizaremos activos y disfrutando de nuestra propia energía.
EN LA NOCHE
La cosecha interna tiene que ver con todos aquellos logros y experiencias que ha alcanzado durante las estaciones anteriores. De este modo puedes restaurar la gratitud hacia tu propia existencia al darte cuenta de lo realizado y todo lo que has alcanzado.
Deja la locura del verano para el próximo año y relajate. El otoño te permite que observa las cosas de otro modo e incluso puede llevarte a la meditación. Basta con desplazarse a un bosque o parque del lugar en el que vivas. Siéntate entre las hojas o en un banco y observa como ha cambiado el color de lo que te rodea o también como van cayendo las hojas lentamente.
También es importante rociar los ambientes de nuestra casa con esencia de citricos (para el buen humor) y mandarina (para la alegría). Estos aromas aportan al cerebro la disposición a hacer los cambios anímicos necesarios para no caer en estados depresivos tan comunes en el equinoccio de otoño.
Por último, es bueno saber que focalizarnos en todo lo bueno que trae siempre un cambio de estación nos va a ayudar no sólo a llevar mejor esa transición sino a disfrutar más del día a día.
Además podemos aprovechar también para reevaluar tu «equilibrio» emocional y para ello hacer un sencillo ejercicio. Consiste en colocarse en silencio con los pies separados a la altura de los hombros, las rodillas flexionadas y los ojos cerrados. ¿Está tu cuerpo quieto y arraigado, o necesitas balancearte o ajustarse para estar completamente equilibrado? Date un momento para recuperar el equilibrio.
Levanta los brazos y mantenlos abiertos, estirados hacia los lados, por unos momentos. Siente lo difícil que es. Ahora comienza con un movimiento suave, llevando las manos hacia el pecho y luego hacia los lados, un movimiento rítmico de apertura y cierre como el batir de las alas de un pájaro. Invocar al Arcangel Miguel, confía en su protección, que no te dejara caer, que si caes te levantara, que te cubre con su luz azul, visualiza en tu entorno y como desprende lo que te estorba, frena y te sientes libre. Agradecemos su presencia y compañía y sigues tu día de forma normal, confiando en la protección y guía del Arcángel Miguel
LLENA TU CASA DE OTOÑO
En otoño comenzamos a pasar más tiempo dentro de casa de modo que es un buen momento para restaurar su equilibrio y puedes sumar algunas decoraciones otoñales para despertar el espíritu festivo de celebraciones como Halloween.
Puedes además aprovechar para limpiar la casa. Ahora es el momento de tirar o regalar cosas no deseadas que ya no son útiles o tienen malas asociaciones. Liberar estos objetos ayudará energéticamente en tus deseos de dejar ir esos pensamientos y creencias que ya no te sirven.
Dado que pasamos mucho más tiempo en interiores durante los meses de invierno, despejar tu espacio vital de objetos ‘deprimentes’ liberará tu vitalidad y energía para concentrarse en lo que más le importa.
ARREGLA EL JARDÍN
Como les comnete en Japón marca los equinoccios, ambos, con un período llamado Ohigan (a veces escrito O-higan). La creencia budista japonesa es que la tierra de la otra vida está hacia el oeste, y durante los equinoccios, el sol se pone directamente hacia el oeste. Los equinoccios también son un símbolo de las transiciones de la vida. La semana alrededor de cada equinoccio es Ohigan, un momento para visitar las tumbas de los antepasados, arreglar las tumbas y dejar flores. También es un momento de meditación y de visitar a los parientes vivos. Esto es algo que nosotros mismo también podemos hacer y si no quieres ir al cementerio puedes hacer por ejemplo otras cosas como organizar tu árbol genealógico.
El camino que marca la naturaleza es el de seguir con lo que nos nutre y nos alimenta y descartar lo que no sirve. Los deseos futuros se proyectan en semillas que se depositan en el altar.
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